Tramo 6-15: Muxía

Este tramo urbano no debéis dejar de hacerlo. Recorre todo el Paseo Marítimo de Muxía hasta llegar a la Igrexa de Santa María donde, por las escaleras del campanario, comenzamos el corto pero duro ascenso al Monte Corpiño, desde donde veremos una amplia panorámica de toda la etapa. Bajamos al faro, el santuario da Barca y las piedras de leyenda, para continuar por la cara oeste de la península, viendo las curiosas leiras delimitadas por piedras y el secadero de congrios, antes de llegar a la Praia de O Coído, final de esta larga etapa.

Longitud  2,9 Km
Dificultad  Baja
Tiempo medio  60′
Terreno Asfalto y losas de piedra
Elevación (m)  88,-89
Pendiente Media  5,6%, -6,3%
Agua  Fonte de Muxía
Servicios  Muxía (todos los servicios)
Mantenimiento  No
Análisis Medioambiental Asociación (sin rigor científico)
Seguridad

Arranca el tramo en el Paseo Marítimo de Muxía…

…hasta llegar al Puerto, donde tomamos el camino que lleva a la Barca.

Pero O Camiño dos Faros no llega por la carretera normal, sino por el Monte Corpiño. al que subimos a través de las escaleras del campanario de la Iglesia de Santa María

Con una subida exigente, que a veces nos obliga hasta a gatear, llegamos al Monte Corpiño, donde las vistas panorámicas de Muxía y toda la ría merecen el esfuerzo realizado.

Desde allí, bajamos a otro de los puntos claves del camino, la Punta da Barca…

… con el Faro de Muxía…

… el Santuario da Barca y las piedras de leyenda que lo rodean, A Pedra de Abalar y A Pedra dos Cadrises. La puesta de sol es una de las mejores que podemos disfrutar en este camino.

Desde el Santuario aún nos queda un pequeño tramo que nos recuerda el accidente del Prestige, que llenó de fuel toda esta costa. Empezamos en el monumento A Ferida

y recorriendo toda esta cara oeste de Muxía, mientras vemos las pequeñas leiras todas divididas perfectamente con piedras y, allá, a lo lejos, el perfil perfectamente dibujado de la siguiente etapa.

Si tenemos suerte, vemos los congrios a secar en el secadero…

y finaliza esta larguísima etapa en la Praia de O Coído, kilómetro 0 del desastre del Prestige.

Un paisaje en cada paso