Salimos de la Praia de Moreira por una pequeña cuesta y nos dirigimos al Faro Touriñán, punto más occidental de la España Peninsular.
Esta segunda mitad de la etapa es prácticamente llana y nos permitirá caminar en paralelo, algo que no es muy fácil en este camino.
Dejamos las aldeas de Touriñán y Campos a nuestra izquierda.
Como pasaba en el Roncudo, son aldeas típicas del Finis Terrae, con gran cantidad de hórreos y gentes especializadas en subsistir a los duros inviernos. Tened en cuenta que hace años las comunicaciones con esta periferia de la periferia eran prácticamente nulas.
Como siempre, en cada paso, alguno de los ingenios de esta Costa da Morte nos sorprende en el camino.
A nuestra derecha vemos toda la punta del Cabo Touriñán
En este lado, durante los grandes temporales, el mar golpea con fuerza una y otra vez.
Después de la recta de asfalto el sendero se desvía a la derecha para bordear toda la punta del cabo.