Matricaria Marítima (macela mariña)

Planta bianual o perenne, con tallos procumbentes, ascendentes o erectos, de 10 – 80 cm, ramificados en la parte superior generalmente a modo de corimbo. Las hojas son alternas, irregularmente 2 – 3 pinnatisectas, con numerosos segmentos lineares, cortos y carnosos, obtusos o cortamente mucronados; tanto el tallo como las hojas son glabros o con unos pocos pelos dispersos. Las flores se reúnen en capítulos pedunculados de 3 – 5 cm de diámetro; sus brácteas se disponen en varias filas, todas con el margen escarioso. El receptáculo es hemisférico – cónico, glabro, sin escamas entre las flores y de consistencia sólida. Las flores externas son liguladas, femeninas, blancas o con tono rosado, mientras que las internas son tubulares, hermafroditas, de color amarillo. El fruto es un aquenio de 1.8 – 3.5 x 1 – 2 mm, más o menos comprimido lateralmente, con 3 costillas lisas conspicuas, casi contiguas e infladas en la cara adaxial y 1 o 2 (raramente más), glándulas resiníferas elípticas, más de dos veces más largas que anchas en el ápice de la cara abaxial; el vilano es una pequeña corona muy corta, a veces ausente.

Hábitat y ecología
Vive en dunas y arenales marítimos ruderalizados y también en marismas con suelo removido, desde el nivel del mar a los 20 m. Aparece en comunidades del Orden Agropyretalia pycnanthi (Clase Salicornietea fruticosae), de plantas bianuales o perennes de tendencias halófilas que se encuentran en suelos enriquecidos en sustancias nitrogenadas en marjales, marismas y costas arenosas.

Luz: Crece a plena luz aunque soporta sombra.
Temperatura: Calor moderado. Piso montano principalmente. Continentalidad: Intermedia.
Humedad: Suelos secos; indicadora de sequedad moderada.
Acidez: Suelos ricos en bases;
pH 5.5 – 8; indicadora de alcalinidad.
Nitrógeno: Principalmente suelos ricos; indicadora de riqueza de nutrientes.

Un paisaje en cada paso